A partir de ahora me tendrán en la nueva revista "LA GAVETA ECONÓMICA". A la que deseo muchos éxitos.
El comentario de este número:
“LA KK DE LOS NÓBELES”
Tengo un amigo que tiene un compadre que es buena
gente. Buena gente con poco arte y sin casi beneficio. Es tan buena gente que
hace unos años se dejó convencer por el encargado del partido en estas tierras
para ser concejal. Y llegó a concejal. Traje de los entierros, corbata y para
el Ayuntamiento. Mi amigo veía a su compadre de vez en cuando presidiendo
jurados el concurso anual de cochinos negros, una vez, otra lo encontró presidiendo el jurado del
concurso de coplas tradicionales y poesía; lo volvió a ver en el de balcones
engalanados y el de artesanía de la madera. Mi amigo se rascaba la coronilla y
se sorprendía de los conocimientos del compadre. Un día le preguntó: ¿Desde
cuanto sabes de de todas esas cosas? La respuesta rápida: ¡Desde que soy
concejal!
De los tertulianos prefiero no comentar de sus kkas.
Ciencia infusa y caradura al cincuenta por ciento.
Hay otros personajes que me dan más miedo. Los premios
Nobel de Economía. No esos “einsteins”
de las barras de los bares, los de verdad.
Veamos. Estos sabios y sesudos señores han pasado su
vida en la torre de marfil de su cátedra. Estoy seguro de que todos son
muchísimo más listos y sabios que yo y que la mayoría de la gente. Estoy seguro
que se han merecido su premio. El primer premio en 1969 fue compartido entre un
noruego (chauvinismo del jurado) y un holandés, Frish y Timbergen se llamaban. Sus
trabajos versaban sobre “la aplicación de modelos dinámicos a los procesos
económicos” (esto pone de manifiesto que la economía estaba, y está, en pañales
del conocimiento de los procesos económicos). Después fueron anualmente desfilando
por Oslo: Samuelson, Kuznet, Hicks, etc.,Krugman, etc. hasta llegar a la
actualidad. Veamos, ahora, algunas motivaciones de premios: “por como regular
los monopolios”, “por análisis de precios de los activos”, “por el papel de las
empresas en la resolución de conflictos”, “por el análisis de los patrones del
comercio y la localización de la actividad”, “por la teoría de los juegos”, y
por cualquier tema específico y parcial que ustedes quieran. Vamos todos sabios
y muy especializados en determinadas cuestiones.
Estos señores que por mor de sus capacidades y,
sobre todo, por su premio Nobel, son frecuentemente consultados y entrevistados
por periodistas. Para el gran público sus palabras son la biblia. Es que lo
dice un Nobel, se dicen, y se lo creen. El astuto entrevistador hace preguntas
genéricas y fuera de la especialidad del Nobel de turno. Normalmente la
respuesta está perfectamente estructurada, pero la verdad es que el susudicho
no tiene ni idea del “mercado de segunda mano de la seda en Birmania” ni “de la
incidencia del fenómeno del niño en la cosecha de café en Etiopía”, pero
contesta. La respuesta salva el pellejo al periodista, facilita el títular del
periódico, asusta a los inversores novatos, pone de los nervios a los brokers
y, sobre todo, no acierta casi nunca. Por muchos equipos que tengan no es su
especialidad. Algunos se ganan la fama y el complemento salarial como
charlatanes de feria, vulgares pitonisos. Si hasta los grandes equipos
preparados para la prognosis económica se equivocan ¿Cómo no va a pasarle eso a
un señor o señora que ha dedicado su vida y sus esfuerzos a “estudiar y
desarrollar métodos para analizar las series temporales con tendencias comunes”?
Sé que es muy difícil eso de predecir y pronosticar.
Pero si esto fuera medicina le estaríamos preguntando al pediatra por artrosis
senil, al del hígado por la muelas, y lo que quieran. Eso es lo que pasa con la
economía y las predicciones de los nóbeles. Que como humanos que son, también
la kkan.
La vida de los mercados está llena de rumores,
medias verdades, mentiras interesadas, y todo el ruido que quieran. En los
mercados, y en la vida, hay que estar atentos. Unos venden y otros compran.
Alguien se queda siempre con la kk. No sean atrevidos como el concejal del
inicio, que por cierto ya no es concejal, ahora, es director general de alguna
kk.
¡Hala, que les vaya bien! Un saludo de
En Las
Medianías, que es mi sitio, a viernes 25 de Septiembre de 2015.
Ir a El Magóez en LA GAVETA ECONÓMICA
Ir a El Magóez en LA GAVETA ECONÓMICA
Cuanta verdad en pocas palabras, amigo magoez, yo añadiría que si los políticos se dedicaran a lo suyo sin inmiscuirse en la economía, sin alterar de forma artificial la economía, sin decir cuando gobiernan que son los mejores, que gracias a ellos "esto y lo otro" que "a todos nos iría muy bien".
ResponderEliminarComo bien dijo alguien "el mejor profeta del futuro es el pasado" o el propio Winston Churchill "El político debe ser capaz de predecir lo que va a pasar mañana, el mes próximo y el año que viene; y de explicar después por qué fue que no ocurrió lo que el predijo".
Y como un amigo me dijo una vez "El de la economía es el único campo en el que dos personas pueden obtener el premio Nobel por decir uno exactamente lo contrario del otro."
Por lo que la KK esta en casi todos los sitios....
RATIFICANDO LO QUE DICE EN EL ARTÍCULO:
ResponderEliminarhttp://www.elconfidencial.com/elecciones-generales/2016-08-10/felipe-gonzalez-rivera-responsabilidad-politica_1245015/
La sorna del Premio Nobel
En particular, procedentes de algunos antiguos dirigentes de su partido, que se creen con legitimidad para irrumpir en un debate por el simple hecho de haber sido ministros o, incluso, presidentes del Gobierno. Probablemente, haciendo bueno aquello que comentaba un antiguo premio Nobel de Economía, que decía con sorna que el galardón de la academia sueca ya le permitía hablar de todo, aunque no tuviera ni idea.